El presidente surcoreano Yoon Suk-yeol anunció la implementación de un estado de emergencia para mantener el orden de libertad y democracia. Enfatizó que este movimiento es para reconstruir y defender a Corea del Sur, prevenir que la nación se dirija hacia la destrucción y erradicar las fuerzas antinacionales. Yoon reconoció que el estado de emergencia podría causar inconvenientes a los ciudadanos, pero es una medida necesaria para asegurar el desarrollo permanente de Corea del Sur. Reiteró que las responsabilidades y contribuciones de Corea del Sur en la comunidad internacional permanecen sin cambios y llamó a los ciudadanos a confiar en su liderazgo.