El IPC de agosto hizo poco para que las criptomonedas se movieran, dejando a grandes jugadores como Bitcoin estancados en punto muerto. Con la próxima decisión de la Fed sobre las tasas a la vuelta de la esquina, el encogimiento de hombros colectivo del mercado se siente menos como incertidumbre y más como un patrón de espera deliberado. Las cifras de la Oficina de Estadísticas Laborales del 11 de septiembre mostraron que el Índice de Precios al Consumidor subió a una tasa anual del 2,9%, aumentando desde el 2,7% de julio debido a las persistentes facturas de energía y comestibles. Mientras tanto, la lectura del IPC subyacente, que elimina esos costos impredecibles de alimentos y energía, se mantuvo firme en el 3,1%. Los datos llegaron en un contexto complejo de crecientes solicitudes de subsidio por desempleo y cifras de nóminas revisadas que pintaron una imagen más turbia de la economía subyacente. Para los crypto traders, el último informe del IPC no pareció ser un evento principal. Los mercados de riesgo trataron su llegada como la pieza final del escenario macroeconómico establecido antes del verdadero cabeza de cartel de la próxima semana: la decisión de política del Comité Federal de Mercado Abierto. La capitalización total del mercado de criptomonedas subió un 0,18% hasta los $3,96 billones, pero el movimiento ocultó una falta de convicción bajo la superficie. Bitcoin (BTC) se mantuvo esencialmente sin cambios en $114.221, con Ethereum (ETH) y Ripple (XRP) cayendo más de un 0,5% cada uno en las últimas 24 horas, según datos de crypto.news. Los indicadores de sentimiento añadieron más matices. El Crypto Fear & Greed Index se mantuvo firme en un 47 "Neutral" tras la caída de los datos. Esta lectura es más reveladora que un cambio dramático. Significa que un mercado está reteniendo conscientemente su respuesta emocional, no está dispuesto a comprometerse plenamente con el riesgo hasta que la política monetaria se aclare. El índice se ha mantenido anclado en este territorio neutral durante toda la semana, apenas moviéndose desde el 43 de ayer y el 44 de la semana pasada. Esta estabilidad contrasta fuertemente con el modo "Greed" de 62 visto el mes pasado y el "Extreme Greed" de 88 que marcó el máximo anual. El informe del IPC de agosto presentó a la Fed un desafío más espinoso. Los costos de refugio subieron un 0,4% en el mes, mientras que los precios de los alimentos subieron un 0,5%, con productos básicos como la carne de res y los productos agrícolas liderando las ganancias. La gasolina subió un 1,9% tras los recientes descensos. Esta corriente cruzada está dando forma a las expectativas de las tasas de interés de cara a la reunión del Comité Federal de Mercado Abierto del 17 al 18 de septiembre. Los mercados ahora asignan una probabilidad del 88% de un recorte de un cuarto de punto y una probabilidad del 11% de un movimiento más profundo de medio punto, según CME FedWatch. Para fin de año, los traders todavía están apostando por un acumulado de 75 puntos básicos de flexibilización. El contexto laboral más suave ha empujado a algunos a valorar una acción más agresiva, incluso cuando los datos de inflación moderan el entusiasmo. [crypto.news]